Por fin tengo entre mis manos una cámara para proporcionarme verdaderos momentos de satisfacción. Me costó encontrarla porque, al salir al mercado la nueva Nikon D300s, la han descatalogado y sólo quedan cámaras en sitios que no las hayan vendido. Y encontré uno y además, adquiriendola de la manera que yo quería. Me ha salido redondo. La diferencia con mi otra cámara, Nikon D70s, es abismal. No hay comparación. Y la D70s es una buena cámara. Calidad de construcción, electrónica, manejo, respuesta. No pararía de escribir. Las pruebas que he hecho son contundentes y la satisfacción plena. Rapidísima, tiene una velocidad de disparo que es casi imposible que se escape algo. El enfoque también es muy bueno con opciones para todos los tipos de fotografía. Y una cosa que me encanta de la fotografía digital, tiene tantísimas variaciones de configuración, que continuamente estas investigando y aprendiendo, que es de lo que se trata. La sensación que da la cámara cuando la tienes en la mano es que sabes que tienes algo serio para hacer buenas, muy buenas cosas. Ahora hay que estar a la altura y saber sacarla todo el rendimiento posible. Estoy en ello. Veremos hasta donde soy capaz de llegar. Casi todas las limitaciones las pondre yo, porque como ya he dicho antes, la cámara, es un pedazo de cámara. A disfrutar lo más posible.
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